Periódico El Higuamo

Desde 1976- Ofreciendo las principales noticias en San Pedro de Macorís, República Dominicana

“Haría lo que fuera para tener un par de arrugas”, dice mujer de 47 años que se siente muy joven

Lo común es que la mayoría de personas en el mundo después de los 30 años comiencen a preocuparse por los signos de envejecimiento, arrugas, pelo canoso, partes caídas, etc, etc.

Ana Bolton, es una extraña excepción, a sus 47 años de edad se le ocurrió todo lo contrario. Ana es madre de 4 hijos y constantemente es confundida con una mujer de mucho menos edad. Ana dice: "parecer una mujer de veinte años de edad está arruinando su vida".

Ana, dice que su apariencia joven ha arruinado un matrimonio y dos noviazgos. Ya que los hombres más jóvenes constantemente la piropean y se ven interesada por ella. Ella cree que sus parejas la han abandonado porque a su lado se sienten más viejos.

Su hijo mayor, que recientemente se ha convertido en padre, odia mostrarse con ella debido a que continuamente lo confunden con su novio.

Ana dice: "Todo el mundo quiere parecer más joven. A mí, parecer joven me está arruinando la vida. Haría lo que fuera para tener un par de arrugas y aparentar más edad".

Necesito que alguien invente un reverso del Botox, así puedo aparentar más edad", agrega Ana.
Ana, se casó con su primer marido a los 24 años de edad. Al principio todo fue feliz. Pero luego, él se ponía muy celoso por la mirada de los hombres jóvenes. "Odiaba que le digan si yo era su hija".

"La gente piensa que debe ser genial, pero yo soy una mujer adulta, con cuatro hijos. No quiero salir con un chico. Yo quiero un hombre de verdad, pero los hombres de mi edad no quieren salir conmigo porque se ven como pervertidos. Me siento atrapado en una trampa y no sé qué hacer".

Las amistades también se han destruido por los celos de su aspecto. Ella dice: "A medida que mis amigas comenzaron a parecer más viejas y yo sólo me veía más joven, ellas me veían como una amenaza.
"Sus maridos me decían lo joven que me veía, eso le molestó y dejaron de invitarme y frecuentarme", dice Ana.